les cuento algo...me he unido al Círculo Whole Kitchen...y qué es eso? pues un grupo de personas que, como a mi, les encanta cocinar, y que, además contar lo que cocinamos y cómo lo cocinamos...l@s organizador@es proponen cada mes una receta dulce y una salada (yo las haré las dos aunque, por razones obvias, publicaré solo la dulce) y todos debemos publicarla en nuestro blog el día indicado...divertido no? está bien porque nos plantea algún que otro reto, y, además, podemos ver cómo una misma receta, puede dar resultados tan diferentes...
y bueno, para estrenarme en el círculo, qué mejor que con mi postre favorito de todos los tiempos!!! un cheesecake!!! es que lo pienso y se me sigue haciendo la boca agua...pese a ser el dulce que más disfruto, nunca nunca lo había preparado... quizás por miedo a que no me quedara como me gusta... pero aquí estoy con mi cheesecake, preparado ahora en formato mini, a ver si como solo uno a la vez (cosa que es casi imposible) pero me parece una forma coqueta de servirlo, además que, de verdad esta delicia es casi mejor disfrutarla así, un poquito cada vez :)
antes de pasar a la receta, quería dedicarle este post (con tarta y todo) a mi prima Rosa "Beny"...que creo que todavía es tan fanática del cheesecake como yo...Rosa...cuando vengas a visitarme te preparo uno con blueberries!
aquí está la receta...
Whole Kitchen en su Propuesta Dulce para el mes de julio nos invita a preparar todo un clásico de la repostería norteamericana, la clásica New York Cheesecake.
este postre se compone de tres partes, la base, el relleno y el topping. para la base y el relleno he seguido las recetas propuestas por Whole Kitchen, con alguna ligera modificación en la base, y la preparación varía un poco por tratarse de un formato más pequeño. he querido prescindir del topping propuesto, para poner uno de mango y limón verde (lima para los españoles) y así darle un toque de acidez a la tarta que ya es bastante densa y dulce...además que adoro el mango y he encontrado verdaderas delicias en el mercadito sabatino del pueblo en el que vivo.
la base
210 gramos de galletas (yo he utilizado 50% marías doradas + 50% maría sin azúcar añadido)
40 gramos de azúcar
120 gramos de mantequilla
se trituran las galletas hasta que queden casi como harina. en un bol se combinan las galletas, el azúcar y la mantequilla derretida hasta formar una masa compacta. se divide la masa en los moldecitos de cupcakes (yo he utilizado unos de wilton que según el paquete son para servir nueces)...se presiona uniformemente la masa sobre el fondo del moldecito. se reserva en la nevera mientras preparamos el relleno.
un consejito. si vamos a servir los mini cheesecakes en un mismo plato, conviene hacerlos lo más parecidos posible en cuanto a grosor de la base y del relleno. para esto he dividido la masa en partes iguales, pesándola...y he puesto 20gr de masa por moldecito. sí, ya se que soy medio maniática...
el relleno
1 kilo de queso crema
190 gramos de azúcar
35 gramos de harina de repostería
5 huevos
80 mililitros de nata/crema de leche
1/4 cucharadita ralladura de limón o extracto de limón (he usado ralladura de limón verde, lo que en España se conoce como lima)
1 cucharadita de extracto de vainilla (yo de despistada use la vainilla negra y me cambió un poco el color de la masa, si se puede, usar vainilla blanca)
se ponen el queso crema, el azúcar y la harina en un bol. se bate a velocidad media durante un minuto más o menos, hasta que tengamos una mezcla suave. se agregan los huevos uno a uno, mezclando bien después de cada adición, pero sin batir demasiado, solo lo necesario para integrar cada huevo. luego se agregan la crema de leche, el limón y la vainilla, mezclando hasta conseguir que todo quede bien integrado. no batir en exceso para no introducir aire en la preparación, pues esto puede hacer que nuestra tarta crezca, y haga grietas, y no es lo que queremos.
se vierte la masa sobre las bases de galletas, y las llevamos al horno precalentado a ciento ochenta grados por cinco minutos, luego bajamos la temperatura a ciento veinte grados y los dejamos durante veinte a veinticinco minutos más, hasta que esté firme.
se saca del horno y se deja enfriar sobre rejilla. en lo que está en el horno y luego enfriando, podemos preparar el topping.
el topping
350gramos de mango
200mililitros de agua
60gramos de azúcar moreno (la próxima vez usaré azúcar blanco porque me quedó oscura la salsa)
zumo de un limón verde
7gramos de gelatina sin sabor/neutra
más mango para decorar
ralladura de limón
se pone en una cacerola el mango picado, el agua, el azúcar y el zumo de limón. se deja hervir quince minutos a fuego medio, luego se tritura hasta que quede tan fino como queramos. se aparta un poco de la mezcla, poco más de la mitad, y se mezcla con la gelatina neutra que habremos hidratado previamente. cubrimos los minicheesecakes con ésta mezcla y llevamos a la nevera por al menos seis horas, aunque al día siguiente es cuando la cosa está mejor.
la salsa de mango y limón que hemos reservado, se usa para servir al emplatar, junto con más mango picadito, que rociaremos con un poquito de limón y al que añadiremos un poco de ralladura de la piel. qué les cuento...está buenisisisisiisisisíma! me encantó el contraste de dulce y ácido que nos da el limón y el gustito a caribe que le da el mango. también se puede servir con piña, lo he hecho así con un par para unos amigos, que no sabía bien si les iba a gustar el mango, y según lo que me contaron, también estaba rica así...
saluditos y buen provecho!